Desde pequeña fue femenina. En su barrio natal la querían mucho porque ayudaba a los niños y niñas a hacer sus tareas. Su nombre era Shakira Quiñonez Ortega y se ganó el nombre por sus caderas.
Nació en El Bagre, Antioquia y era la menor de 9 hermanos. Aunque su familia la aceptó tal y como era, Shakira se mudó a Montería en 2009. Para ellos, se fue buscando mejores oportunidades para salir adelante. Sus compañeras cuentan que llegó escapando de amenazas por su identidad de género. Allí se dedicó al trabajo sexual, hasta que la asesinaron el 12 de julio de 2011.